Enfermedad

Escena 1 / exterior clínica / día.

Vemos los pisos superiores de un gran edificio de vidrio, el día es gris, abajo vemos la puerta de entrada, esta es grande y giratoria, gira constantemente.
Varias personas con vestimenta gris entran maquinalmente siguiendo el ritmo del vaivén de la puerta. Fernández se detiene ante la puerta, observa un rato mira hacia arriba y luego entra.

FUNDE A TITULOS

Escena 2 / interior sala de espera / día.

La sala de espera consta de varios asientos enfrentados a un mesón de recepción.
La gente en la sala de espera se encuentra sentada en sillas con audífonos, los llevan puestos y observan atentamente hacia arriba en donde vemos un televisor dispuesto en altura.
Todas las personas en la sala de espera visten batas de enfermo y beben líquidos celestes desde tubos de ensayo.
La música del lugar es agradable pero envasada.
Iñigo esta sentado en la primera fila de la sala de espera, bebe líquido celeste y viste una bata de enfermo al tiempo que observa a la recepcionista.
La recepcionista mira hacia abajo, Iñigo se quita los audífonos y termina su líquido celeste. Luego se levanta y sale por la puerta del fondo.
La recepcionista alza la cabeza, vemos su ojo.

Escena 3 / pasillo entrada / día.

El Sr. Fernández camina por un largo pasillo, de tanto en tanto mira hacia atrás para ver si alguien lo sigue, luego mira a su alrededor sintiéndose observado luego ingresa por una puerta.

Escena 4 / interior sala de espera / día.

El Sr. Fernández ingresa a la sala de espera luego de atravesar un largo pasillo y se dirige hacia el mesón en donde vemos a la recepcionista.

Sr. Fernández (cansado):
Buenas tardes Señorita, vengo a realizarme un chequeo general.

La recepcionista está sentada tras el mesón con la cabeza gacha, al rato alza la cabeza.


Recepcionista (cordialmente y con una sonrisa):
Por supuesto Sr. Fernández, lo estábamos esperando.

Sr. Fernández (extrañado):
¿Pero cómo? ¿me conoce?.

Recepcionista (siempre cordial):
Pero Sr. Fernández, relájese, pidió Ud. la hora ¿no es cierto?

Sr. Fernández (dudoso y vacilando):
Eh, este, Sí.

Recepcionista (cordial y comprensiva):
¡ Ya lo sabía yo ! Nunca olvido una voz, Y además lo estábamos esperando desde hace 3 minutos (mira hacia abajo).

Fernández se rasca la cabeza intrigado mientras la recepcionista presiona un pequeño botón rojo que se encuentra oculto bajo el mesón.

Recepcionista (siempre cordial):
Bueno ahora despreocúpese la Srta. Enfermera lo llevará a la sala de espera.

Aparece entonces una hermosa Enfermera rubia y de grandes pechos.
El Sr. Fernández la observa embobado al tiempo que ella lo toma de un brazo y lo conduce a la sala de espera.
Mientras caminan La Enfermera mira hacia atrás y coquetea con la recepcionista lamiéndose el labio, la Recepcionista queda boquiabierta mientras mira a La Enfermera excitada.

Mientras caminan la imagen se funde a celeste.

Escena 5 / interior sala de espera / noche.

El Sr. Fernández se encuentra sentado cómodamente en su butaca mientras observa la pantalla en el techo que proyecta imágenes desde el interior del cuerpo humano.

El Sr. Fernández tiene puestos unos audífonos con los que escucha el sonido de las imágenes que corresponden a ruidos del interior del cuerpo (pulsaciones, vísceras, etc.)

La Enfermera se acerca a Fernández, lleva una bandeja metálica con tubos de ensayo de colores azules y diversas pastillas de colores. Fernández se quita los fonos, la relajada música vuelve a sonar y él cambia de expresión y sonríe a la enfermera quien también le sonríe.
Sr. Fernández (irónico):
¿Que están dando en el televisor? ¿Se trata acaso de alguna nueva tendencia?

Enfermera (coqueta):
Nada de eso Sr. Fernández, qué sentido del humor el de usted.

Sr. Fernández (intrigado):
¿Y entonces? ¿De que se trata?.

Enfermera (coqueta y mientras Fernández asiente):
Es que en nuestra clínica tenemos por costumbre mostrar las operaciones que se realizan a los pacientes internos, ya sabe, para una mayor transparencia. Usted ni se imagina la de barbaridades que suceden en otros hospitales. Es por eso que lo hacemos y también por nuestros pacientes, el hecho de ver la cirugía les da una mayor sensación de seguridad, la acerca a ellos y ven que en el fondo es solo rutina.

Sr. Fernández (relajado):
¿Y qué lleva en esa bandeja?.

Enfermera (sorprendida y coqueteando):
¡Oh! ¡qué distraída!, venía a ofrecerle algo para beber o alguna golosina si gusta.

Sr. Fernández (vigorosamente y mientras elige con la mano):
Esta bien, creo que tengo sed, Deme (vacila) el celeste por favor.

La enfermera saca un tubo de ensayo y se lo entrega al Sr. Fernández al tiempo que se agacha mostrando su escote y cerrando un ojo a Fernández que sonríe, luego se retira y Fernández toma el líquido de un trago, toma sus audífonos con intenciones de usarlos pero de pronto escucha el ruido de una puerta que se abre con un sonido agudo y rechinante.
De la puerta del fondo salen dos paramédicos con aspecto de pocos amigos, van apurados y mientras se alejan conversan alterados, no podemos distinguir lo que dicen, solo oímos murmullos. Fernández se pone de pie y camina hacia la puerta, sobre la puerta podemos ver un letrero en que puede leerse: ?PROHIBIDO PASAR ÁREA RESTRINGIDA?
Fernández duda pero luego entra.

La imagen se funde a un color Azul claro.

Escena 6 / interior área restringida / noche.

Fernández cruza la puerta y se queda quieto observando hacia el fondo del pasillo en el que ha entrado, el pasillo es largo y está completamente iluminado por tubos fluorescentes, la profundidad del pasillo intimida a Fernández quien luego de un rato voltea arrepentido de haber penetrado en el área restringida y observa la puerta por la cual entró considerando volver.
Desde atrás de la puerta se puede escuchar que los dos paramédicos conversan en voz alta y sumamente agitados, sus palabras no se alcanzan a distinguir pero suenan preocupados.

Fernández se aleja de la puerta y comienza a avanzar temeroso de que los paramédicos lo descubran en el área restringida, de pronto las luces de los fluorescentes comienzan a titilar, Fernández alcanza a ver una leve mancha de sangre en el techo, en las murallas observamos distintos instrumentos médicos colgando (instrumentos para abrir el esternón, sierras, etc.) todos manchados con sangre y vísceras.
Súbitamente los fluorescentes se apagan algo agitado Fernández tose, su respiración y latidos se aceleran.
La luz vuelve pero algo más tenue y rojiza casi en penumbras, Fernández comienza a avanzar por el pasillo casi por reflejo, sumamente atemorizado.
En el camino hay una camilla con un enfermo diseccionado, al verlo Fernández acelera el paso y se agita aún más.
De pronto Fernández se percata de que una luz sale desde una puerta que se abre. Iñigo se asoma y hace señas a Fernández para que se acerque.

Iñigo (sigilosamente):
Psssst..., venga rápido.

La puerta de entrada al área restringida suena al abrirse, Fernández por temor y curiosidad se apresura en ingresar a la habitación de Iñigo, la habitación esta numerada como la numero 3.

La imagen se funde a un Azul más oscuro.

Escena 7 / interior habitación Nº3 / noche.

La habitación de Iñigo esta sumamente desordenada, en el piso vemos muchos tubos de ensayo rotos, su cama esta desordenada y sus colchas manchadas.
Iñigo toma una silla y con ella tranca la puerta. Su gesto es calculado y revela que antes ya ha hecho lo mismo, luego toma asiento en la cama y le indica a Fernández que se siente en la silla de enfrente.
Fernández se sienta, Iñigo le sonríe, luego abre el cajón de su cómoda, y saca un tubo con líquido azul.
Lo bebe de un sólo trago y tóse con desgarro, escupe un poco de flema en la muralla que esta llena de escupitajos anteriores.

Iñigo (aliviado y sentenciando):
Esto es lo único que alivia mi avanzada enfermedad.

Fernández observa fijamente la flema que resbala por la pared, comienza a sudar.
Agitado retira la vista de la flema y mira a Iñigo quien lo observa sonriente.
Escuchamos el latido del corazón de Fernández, y su acelerada respiración.

Iñigo {dándose cuenta):
Ah..Veo que eres nuevo. En todo caso ya te acostumbraras a la flema, verás, yo ya llevo bastante tiempo aquí y no te haría mal escuchar mis sugerencias.

Iñigo saca mas líquido del cajón, lo succiona con una jeringa y se lo inyecta, sus brazos que están llenos de heridas de perforaciones intravenosas, Fernández lo observa y comienza a sudar y a marearse luego de un rato se repone y tose, Iñigo saca otro tubo de líquido del cajón y se lo entrega a Fernández quien lo comienza a beber.
Iñigo se pone de pie y observa a Fernández mientras toma el líquido, de pronto los paramédicos comienzan a golpear la puerta. Iñigo se altera visiblemente, se muerde las uñas y bebe otro líquido azul más oscuro.

Iñigo (asustado y enojado):
¡Maldito! Por tu culpa me han encontrado, (se muerde las uñas) vienen por mi (busca en el cajón un líquido azul) hasta podrían enviarme a "la sala"

Fernández suda más que antes y su corazón se agita mucho más, tose incesantemente, vota flema, la puerta comienza a ceder ante la insistente golpiza que le propinan los paramédicos, Iñigo asustado toma todos los frascos del líquido azul y los traga rápidamente, luego de esto se acerca a la muralla y abre una rejilla se para y empuja a Fernández al suelo.

Iñigo (enojado y atemorizado):
Vete, me has destruido.

Iñigo patea a Fernández en el suelo para que se apresure y cuando este ha salido cierra la rejilla. Se queda observando la puerta aterrado.

La imagen se funde a un Azul más oscuro.

Escena 8 / interior área consultas médicas/ noche

Fernández sale por una rejilla y observa un cartel en que se puede leer: área de consultas médicas, el lugar es un largo pasillo.
Fernández avanza por el pasillo y se detiene frente a una puerta que esta entreabierta.

Escena 9 /interior la sala / noche

Fernández se asoma. En el interior vemos varias camas con enfermos totalmente quietos envueltos en bolsas negras de morgue con el cierre abierto, todos tienen perforaciones intravenosas conectadas a un suero negro.
Frente a las camas vemos un televisor gigante, todos los enfermos lo observan atentamente. Fernández comienza a escuchar ruidos viscerales y a sudar, su ritmo cardiaco se acelera.
De pronto La Enfermera se acerca seguida de los paramédicos que llevan a Iñigo quien se ve ido, esta lento y babea, los paramédicos sientan a Iñigo en una silla y la enfermera le administra una inyección con líquido negro, Iñigo se desploma sobre sí mismo y los paramédicos lo toman y lo acomodan en una cama.
La Enfermera se acerca y lo conecta al suero. Fernández se encuentra ya mas alterado y sus latidos se aceleran aun más, su sudoración es excesiva, comienza a toser, los paramédicos voltean y se dirigen hacia la puerta visiblemente enojados y apurando el paso.

Escena 10 / interior área consultas médicas/ noche

Fernández horrorizado se aleja y sigue caminando por el pasillo. Se pueden escuchar los pasos de los paramédicos. Estos se aceleran, Fernández comienza a correr, los paramédicos también Fernández corre al tiempo que tose y bota flema, su ritmo cardiaco se acelera y su sudoración aumenta, luego de un rato de huir se tropieza con sus propios pasos, cae y observa cómo se acercan los paramédicos, queda inconsciente

La imagen se funde a un Azul más oscuro.



Escena 11 / interior consulta medico especialista / noche
Fernández se encuentra en una habitación sumamente ordenada, con un escritorio y dos sillas, en el escritorio podemos ver una placa que dice DOC E.S.P.CIALIST.A. Fernández recorre la habitación en busca de una salida luego de comprobar que la única puerta se encuentra cerrada con llave, se dirige al escritorio e intenta abrir un cajón doble, el cajón se encuentra cerrado.
Fernández intenta abrirlo, pero al no poder busca en la oficina del médico algún instrumento con que forzarlo.
Tras el escritorio hay una cortina que cubre una ventana, Fernández la corre descubre que las ventanas están tapadas, en vez de estas podemos ver una estantería con frascos que conservan en líquido distintas partes de cuerpos humanos (ojos, columnas, etc..) también hay fetos nonatos, y expedientes médicos, en una repisa de la estantería hay un cuchillo carnicero manchado con sangre y vísceras. Fernández comienza a agitarse, sudar y toser, sus pulsaciones cardiacas se aceleran, escupe flema.
Fernández toma el cuchillo y se dirige al escritorio del médico, comienza a forzar la cerradura.
Al abrir el cajón se encuentra con un monitor de seguridad.
Fernández se queda observando el monitor, en este podemos ver imágenes de salas de la clínica (área consultas médicas, pasillo entrada, sala de espera, consulta, la sala) Fernández comienza a agitarse, sudar y toser, sus pulsaciones cardiacas se aceleran, escupe flema.
De pronto suena el picaporte de la puerta y vemos entrar a un hombre de cotona blanca y metal injertado en su rostro, La enfermera va a su lado, el hombre la tiene tomada por la cintura, ella viste su uniforme pero esta algo despeinada y con algunos botones desabrochados.

Médico especialista (cordial):
Buenos días Sr. Fernández, por lo visto llega usted, antes de lo esperado y ciertamente no por los conductos regulares.
Fernández atemorizado retrocede hasta dar con la espalda en la pared, siempre empuñando el cuchillo con actitud de rata acorralada.

Sr. Fernández (delirando y lanzando cortes al aire):
No se acerquen, déjenme solo, se que vigilan, vigilan y castigan.

El médico se zafa de La Enfermera bruscamente, La Enfermera lo mira excitada.

Médico especialista (críptico):
Por lo visto su ENFERMEDAD ya le esta provocando las primeras alucinaciones, el líquido azul marino le ayudara a superarlas.

El médico mira a la enfermera quien se acerca a Fernández ofreciéndole un tubo de ensayo con líquido azul (mas oscuro), Fernández empeora, su corazón se agita mas tose y vuelve a escupir flema, estira un poco la mano en busca del líquido pero luego la retira bota el cuchillo.

Fernández (siempre delirante):
No mas líquido, azul...,no.

Médico especialista (críptico):
No se preocupe Ud., nosotros entendemos su situación y lo podemos ayudar.

La puerta se abre y entran los paramédicos, Fernández los observa y se inquieta aún más

Médico especialista (críptico):
No se preocupe Ud., nosotros entendemos su situación y lo debemos ayudar.
Fernández observa a los paramédicos y su condición empeora, vuelve a toser y a escupir flema.
Fernández (siempre delirante):
No, murmullos, no.

Médico especialista ( críptico):
No se preocupe Ud. más, nosotros entendemos su situación y lo vamos a ayudar (mira a la enfermera y hace un gesto)

La Enfermera se acerca a Fernández quien se queda tranquilo luego de beber el líquido. Fernández mira al médico mientras La Enfermera le quita la ropa y luego le pone una bata de enfermo.

Médico especialista ( críptico e irónico):
Bien Sr. Fernández su diagnostico mejora la aceptación del líquido es primordial en casos críticos como el suyo, especialmente después de la expectoración masiva y las arritmias.

Fernández se queda de pie adormecido, la enfermera se acerca al médico que la abraza degeneradamente luego ella se retira con Fernández mientras el médico se sonríe.


La imagen se funde a un azul más oscuro

Escena 12 / interior "La Sala" /Noche

Fernández esta en ?la sala", su aspecto es el de un animal domesticado y camina lentamente apoyado en el brazo de la enfermera mientras babea.
En una parte del camino Fernández se detiene, La Enfermera le tira el brazo pero Fernández no avanza, La Enfermera mira hacia la puerta en donde están los paramédicos ellos comienzan a acercarse.

Fernández comienza a soltar orina, La Enfermera hace un gesto a los paramédicos para que se detengan.

Luego sonríe a Fernández con gesto de reproche, Fernández responde agachando la cabeza.

La Enfermera le saca el camisón a Fernández y lo usa para limpiar la orina del suelo con el pie, luego camina hasta una cama y desconecta a un enfermo el suero negro, el enfermo balbucea y babea, luego queda inerte, La Enfermera cierra el cierre de la bolsa de morgue y vuelve a hacer un gesto a los paramédicos para que se acerquen, los paramédicos se acercan con la camilla y se llevan la bolsa de morgue con el cadáver.
La enfermera saca una bolsa negra desde abajo de la cama, la abre y saca un camisón limpio que esta adentro, coloca la bolsa estirada y abierta en la cama.
Se acerca a Fernández y le pone el camisón nuevo.
Luego le arregla el cabello y le administra la inyección Negra. Lo toma del brazo y lo recuesta dentro de la bolsa de morgue, la cierra un poco.
La Enfermera toma una manguera y conecta el suero negro en el brazo de Fernández, que recostado en la cama, permanece tranquilo observando la pantalla que proyecta imágenes desde el interior de un cuerpo humano.

La imagen se funde a Negro.

TITULOS

Escena 13 / exterior clínica / día

Vemos la fachada de la clínica se escucha el sonido de una agradable mañana, luego este sonido comienza a fundirse con el ruido mecánico de la puerta giratoria. Vemos la puerta giratoria que gira incesantemente.